Bastón de mando

BASTÓN DE MANDO
por Juan Fonseca Nahuehekame Xiuhketzal

El Abuelo Tlakaelel decía: Tenemos una danza llamada “El Águila Blanca”, que representa no a un águila, sino a un ser humano en su búsqueda personal del sentido de la vida (búsqueda que existe en TODAS las culturas humanas). Es un

jóven que empieza a preguntarse por qué está vivo, para qué, cuál es su misión en la vida. En la danza, se dirige hacia un lado y hacia otro, como buscando algo. Y en su búsqueda da vueltas. Luego, mientras va creciendo y madurando, busca hacia nuevos rumbos, y su búsqueda empieza a hacerse más profunda. Entonces sus movimientos avanzan más que antes. Ya es un adulto. Tiene una familia qué mantener, y hace pasos de siembra, pues debe alimentar a sus hijos y su esposa. Pero continúa con la búsqueda. Se dirige hacia los Cuatro Elementos de Agua, Viento, Tierra y Fuego, y hacia los Cuatro Rumbos. Sus pasos se hacen lentos, pues ya es un anciano. Y cuando toda su experiencia y conocimiento le muestran el poder de la vida, alcanza el espíritu del Águila Blanca. Entonces danza con toda plenitud, y extiende sus alas de águila.

El Águila es el ave mexicana que más alto vuela. Los que no volamos, si caemos en un laberinto de zarzas, sufrimos buscando una salida, pero el águila sólamente tiene qué extender sus alas y elevarse por encima de las zarzas. Se dice que la experiencia y conocimiento de los ancianos los hace capaces de eso mismo: ante los problemas, encuentran la solución, y dan consejo a quienes sufrimos por nuestra falta de experiencia. Por eso se dice que los ancianos han alcanzado el espíritu del Aguila Blanca.

Por eso, ser anciano es algo de mucha dignidad en nuestras naciones indígenas.Ser anciano es ser líder, guía, porque el Águila Blanca debe guiar nuestros pasos.

Los ancianos en su mayoría usan un bastón para caminar. Cuando a alguien se le entrega un bastón ceremonialmente, representa que ha alcanzado la dignidad de un abuelo, de un anciano. Se dice que ha alcanzado el espíritu del Aguila Blanca, sin importar la edad. Hay jóvenes que han recibido ese bastón. Un ejemplo es el último tlahtoani Kuauhtemok, que a sus 22 años dirigió la defensa de Tenochtitlan contra los españoles. Había recibido el Bastón de Anciano años antes. Por eso es conocido como el Jóven Abuelo.

Cuando alguien ha sido capaz de aprender de la vida y dirigir a la gente, inspirarla, guiarla, se le entrega el bastón de anciano. Ya es un abuelo, ya es un guía. Por eso, al bastón de anciano se le conoce como Bastón de Mando.

¿Qué opinan ustedes?